La aerotermia en modo refrigeración o modo frío es una opción eficiente y ecológica para mantener el hogar fresco durante los meses de calor. Este sistema utiliza el ciclo inverso de su funcionamiento en modo calefacción, extrayendo el calor del ambiente interior y expulsándolo al exterior.  

Una casa residencial típica equipada con un sistema de aerotermia, destacando como una solución sostenible y eficiente para la climatización del hogar. El sistema, visible con su unidad exterior junto a la pared, muestra cómo la aerotermia puede integrarse fácilmente en viviendas comunes, contribuyendo al ahorro energético y al cuidado del medio ambiente.

El proceso se inicia cuando el refrigerante absorbe el calor del aire interior y lo transfiere al evaporador, donde pasa a estado gaseoso. Luego, el compresor aumenta la presión y la temperatura del refrigerante, lo que permite que el calor sea liberado al exterior a través de la unidad externa. Este ciclo se repite hasta alcanzar la temperatura deseada en el hogar, proporcionando un ambiente fresco sin necesidad de un sistema de aire acondicionado adicional. 

Una de las ventajas clave de la aerotermia en modo refrigeración es su eficiencia energética. A diferencia de los aires acondicionados convencionales, la aerotermia puede reducir el consumo eléctrico al emplear el mismo sistema para calefacción y refrigeración. Esto significa que es posible mantener un ambiente cómodo todo el año sin incrementar los costos de energía.

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